El día que naciste y te tuve entre mis brazos no quise soltarte en horas, me hubiese quedado acurrucada a ti por la eternidad, por esa eternidad que cuentan es del Cielo…, y sabes qué: Eras mi ángel más mundano y terrenal, el serafín más hermoso, me pareciste mi flor más despierta, esa que hizo poblar el sueño de mi jardín de madre.
El día que naciste comprobé que las agujas de los relojes se hicieron flexibles y dibujaron una sonrisa… y ahora que lo recuerdo el primer beso que te di se quedó impreso en mi diario y todavía suena en mi memoria como la mejor de las canciones, repleta de notas serenas y de gozo.
El día que naciste, cuando ya dormías, pensé que tu descanso era mi ternura y que tu paz era mi vida entera, que te vería crecer y crecería contigo…acurrucada a ti como ese día que naciste.
El día que naciste me prometí darte mis manos para cuando tuvieras que sentir las espinas y ofrecerte filtrado el perfume de las rosas, me hice el propósito de ser tus pies para cuando el camino estuviera empedrado y fuera tortuoso, y hacer que tus ojos sólo mirarán al mar los días en calma, y los cerraría las noches de tormenta, sí… ahí sería tu techo y el refugio de tus miedos.
Hija mía ahora que la adolescencia te acaricia y te moldea, en este instante en que los años hacen de tu silueta el perfil y el rostro de una princesa, no olvides que mi reino tiene tu nombre y que tu nombre es mi reino.
billy the kid
"ENVIDIAS DE AMORES".
ResponderEliminar"LA DAMA DE MIS SUEÑOS"
"ENVIDIAS DE AMOR".
"Envidia del mismo aire;
porque acaricia tu cara,
tu melena al desgaire...
No siendo cosa muy rara.
Tengo celos de la lluvia;
porque moja tus cabellos,
seas morena seas rubia...
Soñando me desespero.
Envidia del mismo sol;
y de sus rayos que emanan,
las reglas del corazón...
Con la Luna que es hermana.
Tengo tanto y tanto amor;
que mis dolores reclaman,
muy henchido el corazón...
Me despierto de mañana.
Siento que se me va el alma;
como volutas de savia,
soñando tengo mi calma...
Sin dolores ni su rabia.
Se esparcen por un rincón;
con tu imagen tan gloriosa,
entre tanta sinrazón...
No es historia religiosa.
Cuando tus pies acarician;
la fina arena de playa,
debe ser una delicia...
Y mi corazón se explaya.
Siento envidia de tus labios;
cuando los besa cualquiera,
en mis sueño yo me enrabio...
Jurando duras condenas.
Son otros labios perversos;
esos labios no son míos,
pero tampoco mis besos...
En sueños yo te he querio.
Horror sólo de pensar;
que otras manos traicioneras,
ya me empiezo a calentar...
Con canciones trianeras.
Sueño que no son mis manos;
que acarician y te aturden,
como cualquier ser humano...
Mis sueños ya me confunden.
Te enajenan y te deslumbran;
abandonando tus penas,
oigo las palmas de rumba...
Y mi corazón condena.
Tengo envidia y no conozco;
ni tu cara ni tu cuerpo,
aunque también reconozco...
Que son sueños de recuerdos.
Al soñarte me sonrojo;
con tu olor de caramelo,
con tu busto con tus ojos...
Cuando te vea te camelo.
Siento envidia y tengo celos;
del alimento que recibes,
tengo envidias y recelos...
Tampoco se donde vives.
Y eso qué no has nacido;
con belleza tan preciosa,
no se si ya has yacido...
Tan ingenua y tan hermosa.
Tú serias mi amor primero;
en mis sueños tengo historia,
yo no sueño con dineros...
Contigo estaría en la gloria.
"Analiza el sentimiento;
que aflora del corazón,
si tienes remordimientos...
Quizás no tengas razón.
El amor no tiene edad;
y no conoce de razas,
la religión de verdad...
Siempre la escuda y la alza.
"Guti".
"Un gran abrazo poeta".